¡Éjeleee!
¿Quién pensó que la entrada de hoy era sobre fresquerías novedosas en una
habitación? Pues paso a pasmarles la curiosidad…
Hoy
celebramos el cuarto aniversario de ésta, y otras 2 casitas de palabras. Casi-casi,
Cassi lo obvia, pero decidí que no se puede dejar en el tintero semejante
celebración. La seduje y decidimos que yo la ayudaría.
Yo
soy Carmen, la mejor amiga de Cassiopeia. Somos tan unidas como uña y mugre.
Ella la uña y yo, la mugre….
Una
visita por la primera entrada, y el encabezado de esta casa, permiten tener una
idea de cómo piensa Cassi. Ella, es de las que no se rinden fácil, pero hoy se rajó.
Lleva varios días de unas convulsiones focales muy extrañas. Ahora –hace unos
minutos- se le ha ocurrido intensificar el fastidio a la pierna derecha, fiel compañera
de la República Independiente e Izquierdista.
Desde
que toma unas capsulas color verde dizque de unas algas asquerosas, parece que
le están despertando algunas partes dormidas.
¡Éjeleee!
¿Otra vez pensando en cuentos de contenido sexual? Mejor me apuro antes de que Cassi
me encuentre trasteando su notebook (“Victoria”).
Pues
los nuevos movimientos involuntarios comienzan con una especie de fuetazos
eléctricos que dan vueltas por el pie, hasta llegar a la rodilla. Supuestamente
es efecto de células madres que activan las cochinas cápsulas verdes. A mí que
no me hablan ni de las madres de las células. Lo que vemos es un acto de violencia
intracorporal.
En
un momento dado, el pie se le vuelve loco: los dedos empujan hacia arriba en
forma de abanico, mientras el pie se mueve con violencia hacia los lados.
Simultáneamente se le forman hoyos en distintas partes de la pierna como si los
golpes de electricidad succionaran la piel.
Honestamente,
es un espectáculo digno de una película de horror. Al principio, hace unos
meses, Cassi gritaba del dolor, y hasta hacia sonidos similares a los de película
pornográfica. Ya no. Ahora se aguanta
para no asustar a la gente. La neuróloga está feliz. Dice que la pierna está
“respondiendo”. Yo no sé a qué rayos responde.
Pero
eso que Cassi lo explique luego.
Yo
me quiero limitar a celebrarle el Cuarto Aniversario con rrrico cafecito de los
que le hace su esposo. Lo vamos a ubicar en el margen, sin anuncios. De manera
que se lo lleven los visitantes que gusten… y lo repliquen cuantas veces quieran y como quieran.
No
me voy a despedir sin actualizar el estatus general de mi amiga: ya se
incorpora, se puede sentar y comer solita. Se ducha y puede controlar su
Departamento de Desperdicios Sólidos y Líquidos. El dolor insoportable que sentía
hasta con el roce de la ropa, cesó con una terapia de bloqueo de dolor que
sobrepasaba el que ya tenía. Otra de las muchas bendiciones con las que cuenta:
dejó el tratamiento de quimo, de manera que ya no está tan cansada y puede
mantenerse más activa. Tuvo que dejar las visitas a los gyms de Medicina
Deportiva, y ha perdido masa muscular.
Se
puede poner de pie y arrastrar las piernas asistida de las barras paralelas.
Todavía
no se viste, no se para sola, no tiene balance como para usar andador. De noche,
sigue en el mismo desastre: no tolera dormir sola. No se voltea y hay que
virarla cada hora para evitar ulceras. Se ahoga; odia tener las piernas en posición
horizontal y hay que ponerle una cuña debajo de las rodillas. Ponerla del lado
izquierdo (el único que tolera), es un evento
Si
logro rescatar unas fotos de su celular, las subo… a ella no le gusta, porque
se le ven grandes las nalgas.
¿Cómo
se le van a ver si apenas se mueve?
Bueno,
bueno, bueno… ahora voy a robarle la foto del celu, y paso a pelear con “Mr.
Blogger”, como ella dice. Para mí, que la plataforma se prostituyó con el
cambio de formato.
Mientras,
besazos de parte de la “mugre” que no se separa de la espectacular “uña”,
Carmen