Afuera llueve, truena y relampaguea. Así es noviembre. Así es la vida en el trópico. Tres truenos seguidos y la casa se estremece tres veces. Al rato, escampa, aclara el cielo y la inundación se reduce a los mismos charcos que antes me provocaban varios pasos de un zapateo en un atentado para desquiciar la serenidad de la persona que caminara conmigo.
“Eso” –me decían- “es lo más parecido a las convulsiones”. “Empiezas a sentir los anticipos de la convulsión, como la llovizna. La lluvia arrecia hasta que surgen unas tormentas eléctricas en el cerebro. Pierdes el control de tu cuerpo, que se mueve y estremece de distintas formas. No puedes hacer nada. La convulsión va a pasar sola, y es como cuando escampa, pero en términos físicos te llega el desplome”. La descripción comparativa con las tormentas eléctricas surgió mientras me preparaban para uno de mis primeros electroencefalogramas, hace 11 años y medio.
De acuerdo a ”los que saben” las convulsiones son el resultado de una descarga exagerada de las neuronas. Sus manifestaciones van desde pérdida del conocimiento, alteración en la actividad motora o en el comportamiento, y las contracciones musculares, que se caracterizan por estallidos rítmicos enérgicos de contracciones musculares que pueden afectar extremidades completas o partes de las mismas y que no pueden dominarse voluntariamente.
No coincide con los patrones meteorológicos. Tanto en el caso de los entumorados como en el de los extumorosos (mi aspiración), las convulsiones pueden ser generales o focales. En mi caso –hasta ahora- han sido focales. Alborotan con movimientos involuntarios a Mi República Independiente; esa pierna izquierda que insiste en hacer lo que le venga en gana. ¿Será izquierdista?
Con el paso de los noviembres –que además traen mi cumpleVida el día 30- las convulsiones han ido cambiando. La semana pasada tuve una extensa y dolorosa serie de tormentas eléctricas en el cerebro. Yo dormía, y afuera llovía. Según mi esposo, no se extendió por más de 3 minutos. Me asustó tanto que ahora no sé si escuché “tres” o “diez”. No hay meteorólogo que anticipe mis descargas eléctricas, ni su duración.
A mí, me siguen gustando los noviembres y su lluvia. ¿Las tormentas eléctricas? Asustan, aunque no tanto como las de mi cerebro. Para empezar a celebrar mi fiesta a la vida, les presento un hermoso aguacero con truenos de manos. Los invito a que primero lo vean, y después lo escuchen con los ojos cerrados. Garantizado: les va a gustar... y no necesitarán sombrilla...
12 comentarios:
Al fin te apareces chica!
besitos!
chuik chuik!
Bella! Fue culpa de las tormentas... que llegaron con vientos huracanados...
Muchos besos!
KERIDA.. LLEVO POKO TIEMPO AL PENDIENTE DE LO K ESCRIBES Y DE VERDAD TE ESTOY LLEGANDO A APRECIAR MUCHO!
SE DE LO K HABLAS RESPECTO A LAS CONVULSIONES, AFORTUNADAMENTE ELLAS ESTAN LEJOS DE MI, PERO TRABAJO EN UN HOSPITAL, Y LAS HE VISTO VENIR COMO BIEN LO ESCIRBES.. COMO TORMENTAS!
ESTUDIO MEDICINA, SE LAS KLASIFICACIONES DE LAS CONVULSIONE,S LA FISIOPATOLOGIA Y TRATAMIENTO, PERO CREME.. NADIE SABE MAS DE ESTO, K EL QUE LLEGA A CONVIVIR CON ELLAS!
TE ADMIRO MUCHO! Y TE APRECIO AUN MAS! Y BUENO.. MIRA KON QUE ME ENCUENTRO.. CUMPLES 2 DIAS DESPUES DE MI!!! ASI K A CELEBRAR JUNTAS! MI KUMPLE ES EL 28! JE
POR CIERTO.. TENGO MUCHAS GANAS DE ADOPTARTE, EN ESTE MUNDO BLOGGER HE ADOPTADO UNA ABUELA Y UNA TIA, ME HACES EL HONOR DE SER DE MI FAMILIA? K DICES?? AUN REKIERO DE UNA MAMI! EL LUGAR ESTA DISPONIBLE PARA TI! PIENSALO!
UN ABRAZOTE DAYANN
Dayann, yo llevo poquísimo tiempo por esta ruta y aunque tenga 2 espacios, solo en el 1ro. de este blog explico pq me tardé 11 años en hacerlo.
Voy por partes, pq para empezar el día leyendo tu mensaje, ha salido el sol entre tus letras:
Me alegra saber que trabajas/estudias en el área de la salud. Es importante que contemos con un equipo de ángeles disfrazados de salubristas, y más que todo, que entiendan el lado humano del que sufre.
Las convulsiones sí que son tormentas eléctricas. Pero mi mejor amiga dice que también son como los orgasmos (JAJAJA!!!) cuando al final, después de la trinquera, quedas extenuada, así que al salir de una convulsión, me acuerdo de ella y me río de mi misma. Un día de estos, cuando pase mas tiempo después de esta pasada "tronada" este menos tristona.
A que ningún paciente te ha dicho eso? Ten cuenta a quien se lo dices, pero igual me lo adjudicas!
Admiración? No se si la merezco 24/7... Esto es una lucha de minuto a minuto.
Lo del aprecio... Espero que sea el principio de una linda y larga amistad! (pregúntale a Emma, que hasta chateamos). Por mi parte, yo ya estoy prendada de ti!
Lo del cumpleaños? Celebremos!! Otra compañera de andanzas por los laberintos de los blogs (Missbook) cumplió hace poco y ni te imaginas la fiesta que le hice! (en otras palabras, prepárate para la que vamos a inventarnos).
Adóptame como quieras. Sirvo para todo (aunque eso de abuela nunca lo he probado, en todo lo demás tengo practica y creo que puedo hacer buen papel).
Yo, con espacio siempre disponible, estoy y estaré para ti... y para los que van llegando...
Un abrazote grande, grande, directamente desde trópico caribeño!
Rayos!
Dayann!!!!
Casi te hice una entrada de blog por aca...
Emma y tu se merecen una al frente!!!
Besos a las dos.
MUY BIEN, ENTONCES DESDE HOY, ERES MI MAMA CASSIOPEIA!!
UN ABRAZOTE!!
AH COMO ME REI CON LO DE LOS ORGASMOS! JAJA NUNKA LO HABIA CONSIDERADO ASI! SALUDOS TU HIJA DAYANN
Me provocaste el post sobre el tema!!
Yo nunca he visto a nadie tener convulsiones afortunadamente, no puedo ni imaginar lo que es.
Me gusta tu blog, pero ahora me gustaron mas los comentarios :)
Me apunto por los comentarios! querida Cassiopeia, no pensaba que fueras del trópico como yo, sé muy bien de lo que hablas con respecto a las tormentas, la primera vez que viví una, de esas de tierra caliente que parece que el cielo se va a caer, me asusté muchísimo, se fue la luz y todo, en ese momento contaba con alguien que me consoló y que ya no está conmigo, ahora me tocó acostumbrarme a ellas, e incluso he aprendido a disfrutarlas (cosa dificil con las convulsiones me imagino), pero siempre a pesar de ese sentimiento extraño que te causan pienso: "después de la tormenta viene la calma",además que como normalmente aparecen después de uno de esos días soleados en donde parece que te vas a derretir, es como si el cielo quisiera descansar de tanta presión y la tierra se refrescara... ahora pienso que así es la vida... despues de las convulsiones ella sigue..., incluso un poco mas relajada...
PD. ji ji un poco largo el comentario, disculpa, tus post me hacen reflexionar un montón!
Me apunto por los comentarios! querida Cassiopeia, no pensaba que fueras del trópico como yo, sé muy bien de lo que hablas con respecto a las tormentas, la primera vez que viví una, de esas de tierra caliente que parece que el cielo se va a caer, me asusté muchísimo, se fue la luz y todo, en ese momento contaba con alguien que me consoló y que ya no está conmigo, ahora me tocó acostumbrarme a ellas, e incluso he aprendido a disfrutarlas (cosa dificil con las convulsiones me imagino), pero siempre a pesar de ese sentimiento extraño que te causan pienso: "después de la tormenta viene la calma",además que como normalmente aparecen después de uno de esos días soleados en donde parece que te vas a derretir, es como si el cielo quisiera descansar de tanta presión y la tierra se refrescara... ahora pienso que así es la vida... despues de las convulsiones ella sigue..., incluso un poco mas relajada...
PD. ji ji un poco largo el comentario, disculpa, tus post me hacen reflexionar un montón!
Hola aLeVoSiA!
No son buenas las convulsiones. A mí me da seguridad el que las personas que me rodean sepan que hacer y no se congelen del miedo.
Bienvenida a casita, y bienvenida a los comentarios!!
Besos
Amaranta! Que bueno verte otra vez! Si... del trópico, y en ruta de huracanes. Donde todo el año es verano/primavera.
Alguien me dijo que el multimedia que incluí en este post no se ve. Checa por este medio. Es una lluvia con tormenta eléctrica espectacular:
http://www.youtube.com/watch?v=SfB9lUdOIyo
Besos
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